viernes, 27 de abril de 2012

Interesante

Se alimentan principalmente de peces, calamares y pulpos. Al localizar a sus presas nadan alrededor de ellas formando burbujas que impiden que escapen, de esta forma pueden atraparlas.
Los delfines viven en manadas, pero no permanecen en la misma durante toda su vida, cambian de grupo para migrar, aparearse o buscar comida.
Los grupos se integran desde diez hasta diez mil delfines según la especie. Al estar agrupados se protegen de sus depredadores, entre ellos los tiburones y las orcas.
Así, cuando un tiburón los ataca se defienden en grupo golpeándolo con el hocico hasta matarlo o lograr que huya. Si algún delfín resulta herido, uno de sus compañeros lo sostiene por debajo de sus aletas y lo lleva a la superficie a respirar.
Para comunicarse entre ellos o localizar su alimento utilizan silbidos, gruñidos o chasquidos que producen con su garganta dentro y fuera del agua.


Esos sonidos que emite el delfín viajan en el agua y si encuentran un objeto en su camino producen un eco que regresa al animal. Este eco le permite saber a qué distancia se encuentra el objeto, cuál es su tamaño y qué forma tiene.
El periodo de gestación dura de diez a doce meses según la especie. En el momento del parto la madre nada más despacio; otras hembras la acompañan y evitan que sea atacada por un tiburón.
El delfín nace de cola. Una vez roto el cordón umbilical, nada hacia la superficie a respirar por primera vez; si no puede salir es ayudado por su madre o alguna de las hembras.
Como cualquier mamífero su primer alimento es la leche. Así, cuando la cría tiene hambre se acerca a la madre, quien expulsa la leche en forma de chorro directo a su hocico. La cría tomará leche durante un año o más.


Al principio de su vida la cría nada muy cerca de la madre; a partir de los seis meses empieza a comer peces y se aleja poco a poco hasta separarse por completo de ella.
Los delfines son juguetones, inteligentes, curiosos y sociables. A veces siguen a las embarcaciones que hallan en su camino.
No le temen a los humanos; si se encuentran con ellos se muestran amistosos. Se ha dado el caso de delfines que tratan de empujar a buzos del fondo del mar a la superficie, pues creen que necesitan ayuda.

Su Inteligencia



Los delfines son la segunda especie más inteligente sobre la tierra, únicamente por debajo de los ratones que comen nuestras cosechas; y por encima de las personas, algunos aspectos que demuestran su inteligencia son:
  • Su psicología – El ser humano cuenta con una ilimitada gama de emociones como la flicidad, tristeza, enfado o miedo, lo que nos vuelve imperfectos. Pero los delfines sólo tienen una emoción, una especie de sadismo eufórico.
  • Su sociología – El hombre se ha conducido por la esclavitud, el feudalismo y el capitalismo, estos sistemas son fuente de toda la tristeza y la desdicha del mundo. Los delfines no forman una sociedad. Ellos que con astucia viven debajo del agua nunca necesitaron inventar el fuego (y menos el fuego mojado) o la rueda, viven de la manera más simple con los nudistas humanos para tener sexo.
  • Su tecnología – La humanidad inventa cosas por su carencia de afecto y confianza, pero los delfines no tienen nuestros prejuicios, así que inventan nada, no se complican la vida haciendo ordenadores, móviles o Internet, nunca se les verá conduciendo en un embotellamiento, bastardos inteligentes.
Es por eso que han desarrollado un mecanismo de adaptación al océano que le permite que se duerma sólo la mitad de su cerebro; lo consiguen golpeando su cabeza con la cabeza de otro delfín, mientras una mitad duerme la otra espera a que ocurra algo gracioso.
Se sabe que con sólo medio de su cerebro tienen el mismo coeficiente intelectual que Stephen Hawking, aunque también su misma locomoción, lo que lo convierte en una pequeña desventaja a la hora de huir de los depredadores. Nunca descansan, por eso están tan flacos.
Entre sus facultades psíquicas está la telepatía y el don predecir el futuro (por eso es que cuando tienen una visión ríen sin que nosotros veamos algún motivo aparente). También son capaces de reunirse en lugares donde se produce un acontecimiento cósmico.

Los Delfines

Los delfines son mamíferos acuáticos que habitan en casi todos los mares del planeta. Aunque viven en mar abierto también se acercan a la playa, pero sin llegar a la orilla.
Los delfines están clasificados en especies porque su apariencia es distinta en cuanto a su tamaño, color de piel o forma de la cabeza.
En el planeta existen 32 especies de delfines; en las costas mexicanas habitan 17 de ellas, por ejemplo el delfín común, el tornillo y el risso.
Su cuerpo es alargado; tienen una aleta dorsal y dos laterales o pectorales que varían de forma y tamaño según la especie de que se trate. Así, mientras el delfín costados blancos se caracteriza por sus aletas redondeadas, al delfín fraser se le identifica por tenerlas pequeñas y puntiagudas.

Los delfines también cuentan con cola o aleta caudal aplanada horizontalmente. Con ella baten el agua de arriba abajo para desplazarse y a veces la usan para mantenerse erguidos por un momento en la superficie.
Mediante sus aletas controlan la dirección y mantienen el equilibrio al nadar; también las utilizan para girar o deslizarse sobre uno de los costados.

Una de las cualidades que mejor distingue a los delfines es la velocidad con que nadan, pues algunos alcanzan 45 kilómetros por hora, que equivale a que tú corrieras 700 metros en un minuto.
Como cualquier otro mamífero necesitan mantener constante la temperatura de su cuerpo, para ello cuentan con una ancha capa de grasa bajo su piel delicada y lisa.
La forma de su hocico varía según la especie. Así, el delfín piloto lo tiene muy achatado; el costados blancos, redondeado y el delfín steno lo posee alargado.
Los delfines no tienen nariz; en vez de ella, en la parte superior de la cabeza cuentan con un orificio en forma de media luna, denominado respiradero.

El respiradero se cierra cada vez que se sumergen, lo que evita la entrada de agua a sus pulmones, que podría ahogarlos.
Sus pequeños ojos están situados a ambos lados de la cabeza, al terminar su hocico. Tienen buena vista y pueden localizar objetos dentro y fuera del agua.
También pueden sumergirse hasta 300 metros y aguantar la respiración durante casi veinticinco minutos antes de salir a tomar aire.
Algo muy curioso es que nunca duermen. Para descansar su organismo disminuyen la actividad, flotan y dejan sobresalir su respiradero; a esto se le llama letargo.




viernes, 20 de abril de 2012

HoLa!

Bueno este blog va a estar dedicado a Los Delfines, ¿Por qué elijo este animal?

Porque me encantan desde siempre, son bonitos, graciosos y muy juguetones :)